La Luna. Méliès y malviajes.

Tengo la fortuna de que mi cuarto conecta con una terraza y que del otro lado de la calle los edificios son muy bajos, tampoco es que tenga una vista realmente privilegiada, pero en ciertas ocasiones puedo llegar a vislumbrar dos que tres cosas. Hace rato me acerqué hacia el cancel y ví que la luna, además de estar totalmente redonda estaba peculiarmente brillante. Quise ir a ahí... o que viniera a mí.

Fue entonces que recordé una película que ví no hace mucho, es de esas referencias culturales que uno se topa en muchos lugares, pero nunca sabe muy bien de dónde viene. Tratando de evitar choros semi-informativos sólo diré que Georges Méliès fue un mago francés que en su tiempo innovó muchísimo en materia de efectos e ilusiones en el cine, de alguna manera supo transformar todas sus ideas y trucos para crear mini películas sobre relatos fantásticos. Una de esas cintas es Le voyage dans la Lune, que contiene la famosa escena del cohete estrellado en uno de los ojos de la Luna y ha sido tomada como referencia en videos y otros filmes.



Es muy lindo quedarse una tarde checando varias de sus obras y reflexionando un poco en cómo ha evolucionado todo desde ese entonces: el cine, la tecnología, ideologías, etc. Sólo añado que mi segunda película preferida es  L'homme à la tête de caoutchouc, una historia muy cómica sobre cabezas-globo.

En clase de francés recién nos pusieron un audio sobre la conquista de la Luna, decía que ella siempre ha resultado tan llamativa por lo contradictorio entre su cercanía visual y su lejanía espacial. Básicamente para el hombre representa ese anhelo por lo inaccesible y la fascinación por lo que nunca podrá tener.

Espero que si alguien lee esto, se anime a ver por su ventana.

Feria del mole

A pesar de que no me considero de apetito precisamente voraz, existen platillos y eventos que despiertan a mi hambreado interior. En otras ocasiones he tenido oportunidad de visitar la Feria de las nieves y la Feria del tamal, ahora le tocó al mole.

Puesto venta a granel

Este evento se lleva a cabo anualmente en San Pedro Atocpan, un pueblo en Milpa Alta, esas sureñas y lejanas tierras que no puedes creer que sigan siendo parte del D.F. Sinceramente, fue mi primera vez por esos lugares y desconozco la dinámica para llegar a allá bajo condiciones normales, pero me imagino que gran parte del tráfico se debía a la feria. Haciendo cuentas nos tomó 2 horas y media poder bajarnos del automóvil, así que recomiendo que el viaje se comience temprano, y  entonces tal vez, ahorrar algo de tiempo.

El estacionamiento anda entre los 25 y 50 pesos, la entrada a la feria está en 5 por persona. Ya adentro unose confunde porque encuentra carpas repletas de puestos de artesanías "x", no por desprecio a las artesanías, sino porque eran puestos genéricos -Coyoacán/Ciudadela/etc.- Uno se pregunta ¿dónde está el mole? ...pues cruzando la tierra de los morrales y las pulseras se llega a un área despejada, un corredor al aire libre flanqueado por puestos de comida preparada y otros tantos donde venden sólo el polvo y la pasta.Uno camina recibiendo cualquier cantidad de muestras de variadísimos tipos de mole: almendrado, manzana, verde, pipian, rojo, con arándanos, etc. Confieso que llega un punto en que ya no distingues muy bien el sabor de lo que estás probando y ciertos fluidos comienzan a aflorar, pero qué más da... uno va a atascarse de mole y todos son deliciosos.

Entrada a local. Tortillas hechas a mano. Distintos tipos de maíz.

El precio de los platillos van de 90 a 150 pesos, lo más barato pollo, lo más caro guajolote. Puedes acompañar la comida con agua del local (hay sabores un tanto exóticos, como sabor nopal) o irte a comprar un rico pulque. La feria organiza actividades complementarias como conciertos y talleres de artesanía, además de contar con una zona de juegos mecánicos. Lamentablemente el evento terminó el fin de semana pasado, pero ahora tenemos todo un año para planear la próxima visita.

Ventaneandonos

Sembrando en huacales (o algo así)

Desde hace algún tiempo ando metida en la jardinería, o lo que esto significa en mi mundo, comprando plantitas y cuidándolas, emocionándome cuando florecen y subiendo fotos a instagram (como señora loca de los gatos, pero con plantas), y dentro de todas mis adquisiciones tengo unas cuantas cactáceas.

Siempre que te venden una planta te la dan en la peor maceta que pueden, ya sea de plástico, de lata, muy pequeña o con la tierra muy apretada, y las plantitas resienten todo esto.

Como verán mis pobres plantitas estaban en unas macetas muy feas, por lo que decidí que era momento de ponerlas en una maceta más bonita y que ayudara a las plantas a mantenerse sanas y contentas (sí ya sé, llámenme señora loca de las plantas).

Y bueno, teniendo esto en mente, hace unos meses llegué a un lugar donde venden manualidades en fomi, y me meti a chismosear y entonces vi unos huacalitos (huacalitititos) de madera que estaban ahí arrumbados, así que los compré (por 5 pesos cada uno) y me los traje a mi casa. Decidí que serían las futuras macetas de mis plantitas. 

La señora me los vendió pero me dijo que ella no los había terminado de pintar, entonces mi primer labor fue pintarlos y perforar la base, porque como no es un huacal normal, la parte de abajo es una tabla sólida y las plantas necesitan drenaje.

Después agarré bolsas de plástico (de esas que hay en el super) y se las puse a los huacalitos, esto para que no salga la tierra ni la grava y le hice unos huequitos en el mismo lugar que las perforaciones de la base del huacalititito-

Luego llegó la parte divertida, preparar la tierra para las nuevas macetas, le puse tierra negra, tierra preparada para macetas, sustrato para cactus y un poquito de abono.  

Después me di cuenta que fue muy buena decisión cambiarlas de maceta. La que estaba en la maceta de barro ya tenía las raíces super apretadas en esa maceta, las chiquitas que estaban en la maceta fea tenían  arena super apretada, hasta parecía que le habían echado pegamento, y la que estaba en la lata no tenía casi nada de tierra. Así que las fui sacando de sus macetas con mucho cuidado de no lastimar a las plantas (y no espinarme) y luego las puse en sus nuevas macetas, con suficiente tierra y dándole su espacio a cada planta para que pueda crecer agusto. 

Por último corté el excedente de las bolsas de plástico y tan tán! 

Les dejo unas fotitos para que vean como quedaron en su  nueva casa.

Reutilizando objetos cotidianos.

Con esto de la sustentabilidad y el reciclaje mucha gente se pregunta como puede reciclar o reutilizar cosas, o simplemente darles un uso diferente. Yo no tengo muchos muebles en mi recámara, y en lugar de guardar mis cosas en cajas las tengo como "exhibidas" en una repisa.  He descubierto que si no ves las cosas se te olvida que las tienes (como dicen los gringos: out of sight, out of mind).  Es por esto que intento que todo lo que tengo este a la vista.

 Me gustan mucho las tazas y como tengo bastantes ya no cabían en la cocina, así que decidí empezar  a utilizarlas para guardar cosas. En estas tazas tengo mis pinceles y mis aretes, me gusta que le dan un toque divertido al espacio y mantienen las cosas a la mano y organizadas.

Uno de los misterios más grandes de la vida para mi es como guardar la plancha para el cabello (yo no sé porque tengo tres) y las tenazas, así que le pedí un frasco grande de vidrio a mi mamá (creo que es de cerezas) y ahí pongo las planchas, mis peines y cepillos, y al rededor amarro mis diademas (o como se llamen), así nunca las pierdo y está todo a la mano.

Para tener todos mis lentes de sol a la mano los tengo colgados detrás de la puerta, así los puedo tomar antes de salir y me aseguro de no olvidarlos.

Como no tengo tanto espacio, ocupo estos botecitos y los encimo, en uno guardo anillos, en otro ligas para el cabello y en el chiquito ligas de esas diminutas de plástico que siempre se me rompen.

Utilizo estos ganchos que venden para las puertas, y las pongo en mis repisas para colgar mis collares largos y pulseras.

Y ya por último les dejo una foto de la repisa en cuestión, para que vean como queda todo organizado en un espacio muy pequeño. 

Espero les haya gustado este post, y sobretodo que les sirvan algunas de las ideas, a mi me funciona muy bien. Cuéntenos que objetos reutilizan y donde guardan sus cosas.

MANOV

MANOV es la marca y Pável Jiménez es el hombre detrás. Pável estudió diseño industrial y tomó cursos de joyería y elaboración de calzado, posteriormente se dió cuenta que lo suyo era el diseño de modas y se cambió de carrera. Colaboró con el diseñador mexicano René Orozco llevando las tendencias de la marca y ahora se lanza con la Cápsula 1.1 (próximamente llegará otra cápsula de invierno). Hace algunos meses fui a visitar el atélier y aquí les comparto un poco de mi experiencia.

Cuando ingresas al atélier encuentras un lugar que tiene reflejada la personalidad de Pável y de la marca, los muros de tabique rojo con pintura y yeso regados aquí y allá, en las paredes algunas pinturas obra de Pável.  Podemos ver en un restirador un chaleco en proceso, frente a la máquina de coser podemos ver un proceso de experimentación con los materiales que Pável ocupa en los accesorios.

La pequeña colección o cápsula cuelga de un racket donde se pueden apreciar prendas terminadas y otras tantas en proceso, y bajo éste una mesa con accesorios (collares, pulsos y bolsas) . La mezcla de texturas y los sutiles detalles caracterizan a la marca. En esta primera cápsula el hilo conductor es que todas las piezas son básicos rediseñados, permitiendo así su integración a cualquier guargarropa.

Para describir a MANOV no podemos dejar de lado su esencia, ropa práctica para aquellas personas que buscan ese extra en su atuendo, esa pieza que haga un "statement" y que permita expresar la personalidad dentro de la cotidianidad del empleo o la escuela.

Aunque por el momento está enfocada a la colección masculina, su director no descarta la línea femenina e incluso incurrir en calzado.

Yo por mi parte salí muy contenta con un bolso que se ha convertido en mi favorito, y no podemos pasar de largo la calidad de las prendas y la atención al detalle que seguramente harán que esta marca llegue muy lejos.

Este es mi bolso :D

Ya viene la cápsula de invierno, no olviden visitar su Facebook y Twitter, si gustan pueden agendar una cita para ir a conocer el atelier y el trabajo de este talentoso diseñador mexicano.

Algunos accesorios.

Y bueno cuando iba saliendo del atelier me encontré esta chulada en el muro de un estacionamiento.

Lista de las preferencias de Orge

De las alegrías, las inesperadas.
De las pieles, las no arrancadas.

De los cuentos, los incomprensibles.
De los consejos, los inaplicables.

De las muchachas, las nuevas.
De las mujeres, las infieles.

De los orgasmos, los no simultáneos.
De las enemistades, las mutuas.

De las estancias, las transitorias.
De las despedidas, las desapasionadas.

De las artes, las invalorables.
De los maestros, los inhumables.

De los placeres, los declarables.
De los objetivos, los secundarios.

De los enemigos, los sensibles.
De los amigos, los infantiles.

De los colores, el rojo.
De los mensajes, el mensajero.

De los elementos, el fuego.
De los dioses, el monstruo.

De los que caen, los adulones.
De las estaciones, octubre.

De las vidas, las límpidas.
De las muertes, las rápidas.

Bertolt Brecht

Videojuegos // Portal

Siguiendo un poco en la línea de lo que Diana ha escrito, hoy quisiera referirme a Portal. Seguramente muchas de las personas que lleguen en algún punto a leer esto ya lo habrán jugado, sin embargo es tan divertido que merece una mención especial.

La historia va sobre una chica (tú, jugador) que está en cierto complejo experimental donde le es proporcionada una portal gun (el arma que dispara los portales), valiendote de ésta debes ir avanzando por cada una de las cámaras de prueba y lograr escapar de la fábrica-laboratorio. 

¿Simple no? Lo interesante realmente comienza cuando los desafíos van poniéndose complicados y debes utilizar los portales para llegar lejos, derrotar a tus enemigos, activar switches, etc. Existen dos tipos de portal: el azul que es por donde entras y el naranja que es la salida, si no tienes cuidado te puedes quedar atrapado en un círculo infinito de caídas, o si no andas muy vivo también puedes confundirte y no saber por dónde es que entraste y qué diablos es lo que estás viendo.

Yo soy lentísima y un poco torpe, pero según sé ya voy a más de la mitad, seguramente la gente con aptitudes normales podrá terminarlo rápido.

¡Totalmente recomendable y tiene secuela, así que hay mucho por jugar!